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Mi periplo como estudiante de Educación Judía en el Centro Melton | Maestría internacional en Educación

Mi periplo como estudiante de Educación Judía en el Centro Melton

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"En cada generación, cada individuo está obligado a verse a sí mismo como si personalmente hubiera salido de Egipto”. Esta profunda enseñanza de la hagadá de Pesaj resume la esencia del pueblo judío: una conexión eterna que trasciende fronteras y nos une en una historia y un destino compartidos. Los trágicos acontecimientos recientes en Israel (la masacre del 7 de octubre, la guerra en curso y las pérdidas) han realzado esa sensación de conexión profunda.

Mi periplo como estudiante de Educación Judía en el Centro Melton ha sido una odisea transformadora, donde las actividades académicas se han entrelazado con la rica y profunda herencia judía. Durante mis estudios, tuve la oportunidad de profundizar en las fuentes del pensamiento, la historia y la cultura judía. Los diversos miembros del cuerpo docente y profesores me han guiado a través de una exploración integral de la educación judía, fomentando el pensamiento crítico y una comprensión matizada de nuestra identidad colectiva.

Un aspecto definitorio de mi experiencia ha sido el vibrante tapiz de voces y perspectivas que llenaron nuestras aulas virtuales: nuestros foros de discusión en clase y reuniones por Zoom. Un mosaico de kolot” que reflejaba la diversidad dentro de la comunidad judía. Los diálogos con compañeros de estudios de diversos orígenes, experiencias, culturas y estados enriquecieron mi comprensión de las complejidades y matices inherentes al concepto de pueblo judío.

Al reflexionar sobre el tiempo transcurrido en el programa Melton, puedo decir que desde entonces llevo conmigo no sólo una gran cantidad de conocimientos sino también un profundo sentido de responsabilidad hacia mis hermanos y hermanas judíos. Ahora me siento inspirada a contribuir de manera significativa a la narrativa actual de nuestra historia y propósito compartidos, y representar la voz judía única en el mundo.

Sin embargo, nuestro trabajo como educadores es mayor que eso. Tenemos que seguir recordándonos a nosotros mismos y a nuestras comunidades nuestra misión como “ reino de sacerdotes y nación santa”. La misión judía no se trata sólo de la autoconservación o de los intereses nacionales, sino de contribuir al mejoramiento de la humanidad en su conjunto, como se refleja en el concepto de “or laGoyim”. En palabras del sabio talmúdico rab Tarfon (Pirkei Avot): “ No te dejes intimidar por la enormidad del dolor del mundo. Haz justicia ahora, ama la misericordia ahora, camina humildemente ahora. No estás obligado a completar el trabajo, pero tampoco eres libre de abandonarlo”.

 

premio
Dikla Kafka es estudiante de posgrado en la Maestría Internacional en Educación, Programa Combinado de Maestría especializado en Educación Judía en el Centro Melton.